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4 estrategia para diferenciarse de la competencia

¿Sabías que para el 65 % de los consumidores lo que las marcas dicen, creen y hacen (es decir, sus palabras, valores y acciones) es tan importante como para influir en sus decisiones de compra? Es lo que Accenture sostiene en uno de sus últimos informes. Una afirmación, entre tantas otras, que constata la necesidad de ir un paso más allá si queremos destacar como empresa en un mercado marcado por una feroz competencia.

Ya no basta con ofrecer un buen producto o servicio, ponerle un precio adecuado y promocionarlo a través de diferentes canales. Si te quedas en eso, es muy probable que no logres los resultados que tanto estás esperando. Al contrario, otros lo harán por ti. Para evitarlo, tómales la delantera con estas 4 innovadoras estrategias que te ayudarán a marcar la diferencia.

1. Empieza por ofrecer una propuesta única de venta

Unique selling proposition. ¿Te suena? Es el término que se utiliza para hacer referencia al conjunto de ventajas o beneficios que ofrece una empresa o un producto o servicio a los consumidores.

Muchos negocios echan a andar sin tener muy claro qué ofrecer exactamente y a qué personas dirigirse. A veces esto puede funcionar, pero no es lo normal. Un requisito imprescindible en cualquier plan de negocio es la definición de la propuesta única de venta, eso que te diferencie y te permita competir de forma singular en el mercado.

Estas son las características principales que toda unique selling proposition debería tener:

  • Rápidamente reconocible: la propuesta debe permitir que la marca sea reconocida por todo el mundo.
  • Un valor real y único: ni se debe copiar una propuesta que ya exista ni se deben crear falsas expectativas.
  • Fácilmente comunicable: la simplicidad ha de ser uno de sus principales rasgos.
  • Solucionadora de problemas: que haga ver a la audiencia que satisface necesidades concretas.
  • El factor sentimental: implica emocionalmente a tus clientes para aumentar su compromiso y su fidelidad hacia la marca.

Recuerda que la propuesta que gana no es la mejor, sino la que los clientes perciben como la mejor.

2. ¿No encuentras ninguna ventaja? ¡Céntrate en la diferencia!

¿Qué ocurre si trabajas en un mercado muy saturado y no encuentras ninguna ventaja real que comunicar? ¡Muy fácil! Pon el foco en lo que, en principio, podría ser una desventaja de tu producto o servicio. Eso seguro que lo detectas más fácilmente, ¿verdad?

Es lo que ha hecho, por ejemplo, Cola Cao: mientras las demás marcas de su competencia se disuelven perfectamente en la leche, Cola Cao deja ‘grumitos’. Y presume de ello.

3. Construye una personalidad de marca inspiradora

Ya hemos visto al principio que en pocos casos las personas se guían a la hora de comprar por razonamientos lógicos, objetivos o palpables. Al contrario, lo que te va a permitir llegar al corazón de tus clientes es el branding. Es decir, todos aquellos elementos que dan vida y definen a tu marca.

Detrás de toda gran marca, hay una buena historia. Transmite la tuya a tu público a través de, por ejemplo:

  • Objetivos
  • Emociones
  • Momentos
  • Opiniones
  • Valores

4. Busca tu nicho (o nichos)

Sabemos que puede dar un poco de miedo, pero está contrastado: especializarse es la clave del éxito. De ahí que queramos animarte a que te sumes a la estrategia de nichos, sobre todo si tu marca tiene presencia online.

Ten en cuenta que en el mundo real la competencia es inmensa (y en el virtual, infinita). Por eso, lo mejor es que renuncies a dirigirte a un público masivo y, en cambio, te centres en uno más pequeño, más acotado, que sin duda te prestará mucha más atención.

¿Qué te han parecido estas estrategias para diferenciarte de la competencia? ¿Te atreves a triunfar con alguna de ellas?

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